A veces pasan cosas
raras...
En Mayo y Junio del
2006 organizaron una exposición
de estatuas de vacas en las calles de París y una parte
del rebaño fue instalada en las muy burguesas avenidas
Percier y Delcassé.
Por cierto, en esta
zona de gente bien educada, nadie lastimó a las estatuas
y cuando fui allí a sacar fotos, uno de los porteros se
tomó la molestía de guardar los cubos de basura
para que la foto sea mejor.
Total, cuando unos
individuos llegaron con una furgoneta y se llevaron una de las
vacas, nadie pensó que se trataba de un robo.