Al pasear por la Calle
Saint Honoré, uno se queda un poco despistado al descubrir
este edificio cuya fachada lleva una reja moderna muy curiosa.
Es un edificio levantado
en 1920 por Georges Vaudoyer, sobre el esquema de los edificios
industriales del siglo XIX, y que servía inicialmente de
reserva para el gran almacen del Louvre.
A partir de 1933 albergó
varios departamentos del Ministerio de Haciendas y en 1994 es
cuando fue devuelto al Ministerio de la Cultura.
Entonces empezó
un largo proyecto cuyo objetivo era la reunión en este
lugar de 17 departamentos del Ministerio de la Cultura diseminados
en la Capital.