El brujo en el escaparate (París - 5°)

Los gatos me invitaban a seguirlos, enseñándome el camino.

Les hice caso y así es como encontré al brujo en el escaparate.

 

Y yo que pensaba que estaba domando un gato cuando evidentemente sólo estaba hechizando a los ciclistas de la Centésima Vuelta. Ahora entiendo porque mejoraron otra vez el promedio...