En este cementerio
hay 87 tumbas. Algunas son de grandes señores familiares
del rey Charles X, otras de humildes campesinos.
Lo que más llama
la atención es que todas estas tumbas son sencillas, sobrias
y muy parecidas, como si se tratara de demostrar que todos somos
iguales a la hora de la muerte.
No hay monumento impresionante
excepto el pequeño molino que adorna la tumba de los molineros
Debray. Pero no olvides que estamos en Montmartre y que eran muchos
los molinos.
Y del molino al cielo...