Cuando pasé
por allí topé por casualidad con la directora del
mercado.
Dice que la peculiaridad
de Jules Valles es que tiene una clientela mixta, contando tantos
particulares como comerciantes. Y la verdad es que los expertos
no se perderán los objetos
excepcionales que se esconden en medio de este caos...
También dice
que por ser más pequeño, se controla más
facilmente las mercancías expuestas en el mercado. "¡Aquí
no hay copias, todo
es viejo!".
Yo no soy capaz de
averiguar esta afirmación. Lo que si sé en cambio
es que el ambiente acogedor y sin pretención da ganas de
pasar un buen rato en este mercado.