Esta otra zona sombreada
se llama "Jardín de amor". Supuestamente evoca
el amor cortesano, gran especialidad de la Edad Media.
También encontrarás
una zona de huerto, otra con simples medicinas, un jardín
celeste y... el Bosque del Unicornio.
Por cierto, ya transcurrieron
varios siglos desde la última visita de este animal fantástico,
así que no lo busques en el bosque.
Pero si quieres verlo,
entra en el Museo y busca el tapiz que llaman "La Dama y
el Unicornio".
Yo me conformo con
saborear la tranquilidad de estos jardines.