Montmartre

El Cementerio de Montmartre

En el siglo XVIII el terreno del cementerio se hallaba fuera de los límites de la Ciudad de París y permitía acceder a las canteras de yeso de la colina de Montmartre.

Varias galerías abandonadas fueron utilizadas para enterrar clandestinamente a las victimas de los motines de la Revolución Francesa.

 

En 1798 es cuando la administración instaló un primer cementerio de 1,27 hectárea pero eso no dio para mucho tiempo.

En 1825 es cuando fue extendido por primera vez y abierto de nuevo oficialmente.

En 1847 es cuando hicieron la última extensión y ahora llega a unas 11 hectáreas.

 

En aquel entonces, este espacio se parecía a un pequeño valle en medio de tres colinas arboladas y resultaba muy agradable para sus contemporáneos.

Por lo menos eso escribía Guy de Maupassant.

Pero en 1867 es cuando el Barón Haussmann imaginó la creación de la calle Caulaincourt para dar la vuelta de la Colina de Montmartre.

 

Eso imponía atravesar el cementerio y provocó muchas protestas e incluso un debate en el Senado.

 
Pero el proyecto fue realizado y en 1888 es cuando construyeron el puente de la Calle Caulaincourt.

Es el primer puente de acero de París y tiene 135 metros de largo y 16 metros de ancho.

Pero este cementerio sigue un espacio mágico con su colección de curiosidades y una cantidad impresionante de estatuas.